Tu cuerpo y el mío.
Hubo una vez, una fusión tan fuerte que me corrompió el alma.
Entro a mi vida sin pedir permiso, como un terremoto y llego solo a transformar(me).
Me metí en un horno de nuevo, fui tomando la forma de tu cuerpo desnudo,
curva tras curva, mente tras mente, pero apagaste el horno a mitad de cocción,
me dejaste medio cruda, medio sin rumbo.
Tu cuerpo fusiona tan bien con el mío en este momento
que mi cabeza se niega a querer cambiarme,
aunque mi alma se lo implore,
aunque mi vida lo necesite.
Entro a mi vida sin pedir permiso, como un terremoto y llego solo a transformar(me).
Me metí en un horno de nuevo, fui tomando la forma de tu cuerpo desnudo,
curva tras curva, mente tras mente, pero apagaste el horno a mitad de cocción,
me dejaste medio cruda, medio sin rumbo.
Tu cuerpo fusiona tan bien con el mío en este momento
que mi cabeza se niega a querer cambiarme,
aunque mi alma se lo implore,
aunque mi vida lo necesite.
(Relatos desesperados de una mente que analiza en paz, porque sabe que el tiempo existe, y soluciona.)
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